En el año 1921 nacía en Florencia la compañía Gucci, fundada por Guccio Gucci. Su fundador, florentino DOC, inició su vida profesional muy joven como botones en el Hotel Savoy de Londres. Esta experiencia le permitió conocer el estilo inglés, los caballos y la equitación, que se transformaron posteriormente en los pilares fundamentales del estilo de la “Maison”. Así, en 1934, la empresa introdujo el logo del botones con una maleta y una bolsa de mano. Además, en los años 30 muchos de los clientes italianos de Gucci eran personas de la alta sociedad que practicaban la equitación, elemento que impulsó al fundador a desarrollar el exclusivo ícono que representa la miniatura de las riendas del caballo y la cinta verde-roja-verde que retoma el tradicional revés de las sillas de montar.
En los años 40, enfrentando la carencia de material debida al bloqueo impuesto a Italia durante el fascismo, Gucci se reafirma como sinónimo de creatividad e inventiva excepcional. De hecho en estos años la famosísima cartera “Bamboo” nació como el primero de numerosos productos-íconos de Gucci.
En 1955, Gucci abrió su primer negocio en los Estados Unidos, en la 58ma calle de New York. Desde allí comienza la expansión americana de la marca y los productos Gucci, que se afirman muy rápidamente por su design exclusivo, conquistando el corazón de star del cine y del jet-set americano.
En 1960, Aldo Gucci uno de los tres hijos de Gucci, diseña el símbolo con las dos G entrelazadas, en clara referencia a las iniciales del fundador. Este diseño gráfico, cuando aún no se había transformado en el símbolo de la agencia, se propuso en difenrentes versiones: fundidas en un círculo, contrapuestas e invertidas en forma abstracta.
En 1992 aparecerá oficialmente como logo de la empresa el símbolo de la doble “G” hasta ahora utilizado sólo como marca en las carteras, zapatos y cinturones. A partir de 1998, las comunicaciones oficiales serán dentificadas por un sólo logotipo compuesto por caracteres “graziato lapidario”, muy espaciados: es con este logo que la empresa se presenta en el mundo como la expresión característica del “Made in Italy”. En los últimos años, bajo la guía creativa de Alessandro Michele, la marca Gucci se ha transformado en el brand que dicta las reglas en el mundo de la moda, uniendo la historia y la tradición italiana del “saber hacer” a una potentísima carga innovadora.